Vinculos Google

jueves, 3 de mayo de 2012

El debate Sarkozy Hollande: No hay vencedor entonces hay un perdedor

El debate Sarkozy - Hollande: No hay vencedor entonces hay un perdedor
Sarkozy tenía en mano dos objetivos: Demostrar que su oponente estaba un hombre débil, sin poder de decisión, blando y segundo objetivo demostrar al publico que el seria el presidente de la ruptura, con nuevas ideas para salir el país de la crisis.
Sarkozy ha intentado ser muy ofensivo al inicio pero ha sido sorprendido por la reactividad de Hollande, por esto Nicolas Sarkozy ha parecido a lo largo del debate más agresivo, mientras François Hollande ha conseguido poner encima de la mesa, los resultados y la evaluación de los cinco años de mandato de presidente saliente.
Nicolas Sarkozy no ha podido de-estabilizar François Hollande que se ha impuesto, en una actitud “Mitterrandiana”, como presidente creíble.

La tenacidad de François Hollande

Es un excelente polemista, se sabía, y había mostrado ya en las emisiones de la campaña, además tiene un muy buen conocimiento de los asuntos. Cuando no responde a las cuestiones, es por habilidad, no por incompetencia. En realidad, en este tipo de duelo, cada uno acampa sobre sus posiciones y el espectador sale siempre convencido por el candidato que ha elegido. Pero es el estilo que se observa, la personalidad: se ha visto que François Hollande tenía menos seguridad pero no menos consistencia. Estaba físicamente en el papel del favorito: menos agresivo, más educado. Cuanto más el tiempo pasaba, tanto más Nicolas Sarkozy se irritaba. Sentía que la situación le escapaba. Y tenía razón.

François Hollande ha conseguido esquivar los ataques

François Hollande también ha tenido algunas buenas secuencias (sobre todo sobre su visión de la presidencia). Sobre todo, ha conseguido atrapar Nicolas Sarkozy obligándolo sin descanso a justificar su balance, en un alegato que no podía convencer - porque una mayoría de franceses conocen dificultades. El resultado, es que Nicolas Sarkozy se ha encontrado a la defensiva mientras que debía ser ofensivo. Que no ha podido insistir como lo quería, seguramente, sobre su argumentación específica hacia los electores de Le Pen. Y que no ha conseguido "desalojar" François Hollande, como se lo había prometido, sobre la parte más sensible: las medidas de economía para reducir la deuda. Hollande se ha apañado para no responder nunca a esta cuestión.

Sarkozy: «¡Es una calumnia! ¡Una mentira!»

En sus reuniones, Nicolas Sarkozy no ha parado acusar François Hollande de «mentiroso». Ha repetido este reproche, a lo largo del debate. «¡Está siempre contento de Usted! Los franceses lo son menos», ha ironizado Hollande. «¡Es una mentira»!, se defiende Sarkozy. El candidato Hollande prosigue: «¡Por tanto, está descontento con Usted, me he debido equivocar!» «Señor Hollande, no es el concurso de la pequeña broma», ha contestado al presidente, que, más tarde, ha irritado verse reprochar que les haya hecho «regalos a los ricos». «¡Es una calumnia, una mentira!», se indigno. Hollande ríe, antes de atacar: «Añade ahora la calumnia a la mentira... No es capaz de mantener un razonamiento sin ser desagradable (...) ¿y dice que es un presidente agrupador?».
En la idea de los franceses para el puesto de presidente de la república, el hecho de ser el presidente de todos, por encima de los partidos políticos; un presidente agrupador y distante de los combates de clanes contra otros clanes, sin duda.
François Hollande ha demostrado ser capaz de ser un bueno Presidente de la República.
Al contrario Nicolas Sarkozy que no tenia que demostrar su capacidad al puesto, debido que es el presidente saliente, debía derrotar por KO su opinante, no lo ha conseguido, entonces François Hollande será el próximo Presidente de la República Francesa, es mi análisis, mi deseo y mi voto del próximo domingo.
Los socialistas franceses saben mucho de economía, al contrario de los socialistas españoles; entonces la probabilidad que pasara con los socialistas franceses lo que paso con los socialistas españoles en casi nula.

miércoles, 2 de mayo de 2012

¿Mossos o Antisistemas?

Ayer, al final de la tarde estuve paseando cerca del Molino, el la avenida Paralelo, cuando, en la esquina de una pequeña calle, he visto un grupo de encapuchados, caras tapadas, bastante nerviosos. He pensado enseguida a un grupo de estos anti-sistemas hasta observar que algunos (no todos como dice en articulo publicado hoy en Lavanguardia) llevaban un discreto brazalete marcado Mossos d’Esquadra. Tal y como se puede observar en el articulo de Lavanguardia Los Mossos ensayan el blindaje para la reunión del BCE en Barcelona 
Pasamos con tranquilidad, a pesar de las miradas agresivas, 20 metros después, oigo un grito “STOP” y he visto saltar delante de mis ojos, como una tortuga Ninja, un de estos individuos que enseguida me cacheo y después se fui sin decir nada, ni siquiera disculparse de la molestia.Mi primer reflejo, tras este control tan agresivo, fui de verificar si mi cartera esta presente en mi bolsillo, tenia duda frente a esta agresión sobre la realidad policial de este individuo, he resentido al momento este comportamiento poco digno de un estado de derecho.Tras este evento, me han surgido varias reflexiones que quiero compartir con mis lectores: 
  • Se debería informar a estos policías que un ciudadano que pasea tranquilamente en la calle, no es a priori delincuente y tampoco sospechoso de ser lo, si su único “crimen” es pasear con tranquilidad.
  • Las autoridades quieren prohibir a los manifestantes taparse la cara, en un estado de derecho, la policía deben ser la primera a mostrar el respeto de las leyes.
  • Si la policía no se diferencia, tanto por los vestidos que por las actitudes agresivas, de los delincuentes: ¿como el ciudadano de la calle puede diferenciar un policía de un delincuente? (La misión de la policía es garantir la seguridad y no crear un sentimiento de inseguridad).
  • En Europa, somos la civilización de la cara descubierta, por eso utilizamos la expresión “dar la cara”, creo que un policía que decide arrestar (que sea por un minuto) un ciudadano que no ha comedido ningún delito, debe presentar la cara y elementos de identificación, es mi concepción de la policía en un estado de derecho. Para evitar precisamente los comportamiento agresivos y prepotentes que he vivido ayer.
  • La policía tiene poder de prohibir una manifestación o bien prohibir pasear en unas calles, si no lo hace, se debe respetar el derecho de libre circulación y si se controla alguien se debe utilizar un tono y modalidad respetuosa, conforme a los derechos humanos.
Prefiero no pensar es una forma de intimidación premeditada para impedir la participación a una manifestación del primer de mayo, en efecto no iba a participar iba simplemente a tomar un café con un amigo, o bien que los anti-sistemas son en realidad policías de paisanos…
Tengo 55 años, cabellos blancos y cortos, vestido correctamente sin capucha, entonces yo, al contrario de mi agresor, no parezco de nada a un anti-sistema.

Mas allá de este evento, creo que seria útil abrir algunos debates:
  • ¿A que sirve una policía autonómica si no se comporta diferentemente de una policía franquista?
    ¿No es posible que sean bien educado y respetuoso del derecho?
  • ¿La visita de estos banqueros de la BCE supone, a pesar de los recortes que ellos imponen también un recorte de las libertades individuales?
En efectos estos señores, fieles siervos de los mercados financieros que han puesto los intereses de unos pocos encima de la democracia europea, que tienen una responsabilidad tremenda en la crisis y su gestión, que piden recortar los derechos sociales de todos los trabajadores de Europa sin recortar sus propios sueldos y ventajas, para mi, no son bienvenidos por todos los efectos colaterales que vamos a sufrir.
Tras exigir muchos recortes a España, vienen hacer un turismo administrativo lujoso, a cuenta de las finanzas del estado español y de la generalidad, la primera muestra de respeto a los esfuerzos que están pidiendo a los ciudadanos seria de quedarse en sus oficinas y no hacer muestra de su prepotencia y modo de vida de lujo a cuenta de los más pobres.
¡Sin vergüenzas!